Pros y contras de la reunificación de deudas
En ocasiones, los gastos familiares se disparan y es imposible hacer frente a todos ellos.
Contenido de este artículo:
- Más créditos de los que puedes pagar
- Reunificación de deudas al rescate
- Ventajas y desventajas de la reunificación de deudas
Es entonces cuando no queda más remedio que solicitar un crédito online. Sin embargo, la acumulación de créditos puede convertirse en una trampa mortal. Sobre todo si al sumar los pagos mensuales destinados a la devolución de los mismos la cantidad resultante es tan alta que apenas te queda dinero para vivir el resto del mes. En ese caso, deberías pensar en reunificar tus deudas para pagar una única cuota mensual más asequible.
Hay personas tan endeudadas que cuando cobran su sueldo a principios de mes y comienzan a pagar las cuotas de todos sus préstamos, apenas les queda dinero para poder vivir durante el resto del mes.
Si te encuentras en una situación así, tienes que buscar una solución.
Y la solución puede pasar por la reunificación de deudas.
Más créditos de los que puedes pagar
Las posibles situaciones de endeudamiento son múltiples; y no siempre son causadas por comportamientos irresponsables o poco previsores.
Si estás pagando la hipoteca de tu casa, el préstamo del coche y un tratamiento dental que has tenido que financiar a plazos, lo más razonable sería no contraer más deudas.
Pero el problema llega cuando se produce un imprevisto con el que no contabas. En ese caso, mucha gente utiliza la tarjeta de crédito para financiar esas necesidades puntuales de liquidez, que se cubrirían mejor con préstamos personales online como estos.
Independientemente de la opción que elijas para salir del atolladero, si vas a solicitar un nuevo crédito debes reflexionar acerca de tu capacidad para hacer frente a todos los pagos hasta que canceles todas tus deudas.
Lo mejor es guiarse por la regla de que para la vivienda es mejor no pagar de hipoteca una cuota mensual superior al 25% de los ingresos totales del hogar. Y la suma de las cuotas mensuales del resto de los préstamos que hayas contraído no deberían exceder del 10%.
Si eres de los que no siguen esos criterios y excedes el nivel de endeudamiento aconsejable, tarde o temprano te encontrarás con que una gran parte de lo que ganas se destina a pagar créditos.
En ese caso, vas a tener problemas para poder ahorrar; e incluso para llegar a fin de mes (desgraciadamente hay que comer todos los días, pagar la luz, la calefacción, los impuestos…).
Reunificación de deudas al rescate
Para reunificar deudas lo primero que hay que hacer es desglosar todos los pagos de hipoteca, microcréditos, financiaciones al consumo, tarjetas…
Una vez que tengas clara la cantidad total que pagas al mes en concepto de devolución de deudas, debes buscar un préstamo que te permita pagar todas las deudas, con unas condiciones de devolución más asequibles a tu nivel de ingresos actual.
Por ejemplo: si mensualmente pagas 450 euros de hipoteca, 275 euros de coche, 190 euros de tarjetas de crédito y 25 euros de un préstamo para el móvil, tu pago de deudas ascenderá a 940 euros.
Si tu sueldo neto es de 1.400 euros, con esa cantidad de pagos mensuales se complica mucho llegar a fin de mes. Y no te digo nada de vivir con cierta holgura.
Pero si reunificas todos tus créditos mediante un préstamo que te permita cancelar el total de la deuda pendiente, alargando el plazo de devolución, podrías reducir la cuota mensual de ese nuevo préstamo hasta unos 350 euros al mes.
Gracias a eso, tendrías disponibles 590 euros adicionales, con los que respirar un poco.
Ventajas y desventajas de la reunificación de deudas
La reunificación no es una medida deseable, sino justo lo contrario: una solución para una situación desesperada.
Si no te queda más remedio que recurrir a ella, conseguirás:
- Más dinero disponible todos los meses.
- Aumentar tu capacidad de ahorro.
- Tendrás una segunda oportunidad para gestionar mejor tus finanzas personales.
- Sin embargo, las pegas son elevadas y conviene que las tengas claras:
- Elevadas y numerosas comisiones: hay que pagar una importante cantidad de gastos y comisiones de cancelación de los viejos préstamos, así como de apertura por los nuevos.
- Aumento del coste final de la deuda: la cantidad mensual bajará, pero al final terminarás pagando mucho más dinero que el inicialmente previsto, puesto que los intereses aumentan mucho.
- Pago a intermediarios: este tipo de préstamos para reunificar deudas se suelen gestionar a través de intermediarios que no son precisamente baratos.
- Necesidad de garantías: este tipo de operaciones solo son posibles si tienes una vivienda en propiedad, ya que esta será la garantía del préstamo. Y además, también podrían solicitarte avalistas solventes.